Deja huella como docente con tu marca personal

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25 September 2024

Entrevista a Miquel Rossy sobre la importancia de la marca personal en el éxito de la escuela

por Impuls Educació

Miquel Rossy es asesor de marcas escolares y diseñador gráfico. Licenciado en filología catalana por la Universidad de Barcelona, ejerció durante muchos años como profesor de lengua catalana y literatura a Bachillerato y Secundaria. Actualmente, se dedica a crear identidades institucionales, sobre todo de fundaciones y entidades vinculadas al ámbito educativo. Autor de los libros “Profes que marcan” (2024, LID), “Lo secreto del marketing educativo” (2020, Santillana Educación) y “Tu escuela, una gran marca” (2016, Branding escolar).

Entrevista a Miquel Rossy

¿Por qué “Profes que marcan”? ¿Qué buscabas cuando escribiste este libro?

Se ha insistido mucho —yo también lo he hecho— en que las marcas, hoy en día, son humanas, que, por encima de logotipos, textos corporativos e instalaciones, su valor está sobre todo en la actuación de las personas que forman parte. ¿Existe alguna marca que pueda decir que es más humana que una escuela?

Ya había escrito mucho en mi blog brandingescolar.com y en los libros “Tu escuela, una gran marca” y “El secreto del marketing educativo” sobre la relevancia de las relaciones humanas que se establecen en una escuela; sobre la importancia de atender las necesidades de los alumnos y de las familias, de entender su comunicación no verbal, la empatía, la asertividad, en definitiva, de todo el marco relacional; una formación ahora imprescindible.

Pero teníamos que dirigirnos a cada docente para trabajar su propia marca personal, su reputación y sus aspiraciones. Con este libro, he querido ofrecerles una guía para que reflexionen alrededor de estas cuestiones tan importantes que los ayudarán a crecer profesionalmente.

La marca de la escuela es la suma de las marcas personales de cada uno de sus docentes. Me gusta compararlo con un equipo de fútbol. El equipo formado por Iniesta, Busquets, Messi, Suárez, Neymar… que ganó la Champions el 2015 era el Barça. Pero también lo era el equipo que no ganó nada el 2022, con algunos jugadores ya mayores, sin Messi y con algunas incorporaciones que no aportaron mucha cosa. ¿Es el mismo equipo? Teóricamente sí, pero en realidad no lo es. Lo mismo pasa en una escuela. Si tienes un gran equipo, es porque tienes grandes profesores.

La marca de la escuela es la suma de las marcas personales de cada uno de sus docentes
¿Por qué es importante tener marca personal?

Conviene entender a qué nos referimos cuando hablamos de marca personal. Estos días me han llegado comentarios como: “¡Qué interesante! Has publicado un libro para que el profesorado tenga reputación en Internet, para que sean influencers en Instagram…” No, no se trata de eso. En vez de hablar de marca personal, deberíamos hablar de “dejar” marca personal. Lo importante es dejar huella que aporte al alumnado y a sus familias. Todos ya tenemos marca personal, porque, lo queramos o no, nos ven y nos juzgan. Se trata de conocerse mejor, para poder proponerse unos hitos más conscientes y ver de qué manera los podemos comunicar.

Todos tenemos marca personal, porque nos ven y nos juzgan; se trata de conocerse mejor, para proponerse hitos conscientes

Algunos profesores decidirán tener redes sociales muy activas; otros, en cambio, preferirán centrarse exclusivamente en su trabajo docente en el aula, que ya es una aportación extraordinaria en beneficio de toda la sociedad. Animo a que todos aquellos que sean capaces de ofrecer contenidos de calidad en un canal de YouTube, en un pódcast o en un blog, por favor, no dejen de hacerlo. Pero que no se sientan obligados. Y que no jueguen en solitario —siguiendo el símil deportivo— como algunos futbolistas que no hay manera que compartan la pelota con el resto del equipo.

¿Qué es exactamente la marca personal?

Yo suelo dar esta definición más académica: la marca personal es el reflejo en el alumnado de tu identidad —tu manera de ser, tus convicciones y tu propósito— a través de una conducta coherente. Podríamos simplificarlo diciendo sencillamente que la marca personal es “como te ven los otros”, qué confianza generas, qué impacto dejas en tu alumnado, en tus compañeros, en la sociedad.

La marca personal es el reflejo en el alumnado de tu identidad a través de tu conducta, como tu propósito o forma de ser
¿Qué opinan los centros educativos acerca de que el profesorado se dedique a desarrollar su marca personal? ¿Esto no los saca motivación para llevar a cabo la tarea educativa de su escuela?

Al contrario. Es verdad que a menudo muchos directivos temen tener en su centro vedettes. Y quizás es culpa de una mala comprensión de lo que es la marca personal, también en algunos docentes. Cuando un profesor o profesora, en cambio, trabaja bien su marca, no solo crece él o ella, sino que hace crecer a quienes tiene a su alrededor. Por ejemplo, haber reflexionado sobre cuáles son sus propios valores, lo hace ser más consciente también de cuáles son los de su centro y contribuye de una manera más firme.

Los directivos que desconfían habría que decirles que no se trata de tener gente dócil y obediente, sin capacidad de aportar nada por cuenta propia. Comparémoslo con un tablero de ajedrez. Está el rey y la reina —el equipo directivo— y todas las otras piezas, alfiles, caballos, torres… Pero no hay peones. Estamos hablando de gente formada, capaz de llegar hasta el final del tablero y volver atrás. Está claro que es más fácil dirigir un equipo donde solo hay peones, pero así no se gana ninguna partida. La dirección tiene que aspirar a tener torres sólidas, ágiles alfiles que saben triangular o caballos artistas, un poco caóticos, pero que son los que se adaptan mejor a los escenarios difíciles.

¿A quién va dirigido el libro “Profes que marcan”?

A cualquier docente que quiera plantearse cómo es la huella que está dejando en su entorno. Puede ser un maestro que empieza su camino y quiere hacerlo con solidez o una profesora que ya cuenta con una larga trayectoria y ve que necesita reflexionar sobre su recorrido y poder corregir algunos aspectos. También otra que ha asumido recientemente un cargo directivo o un profesor que quiere sacar el máximo provecho de la actividad que está desarrollando en su canal de YouTube.

Sea cual sea la situación —tanto si alguien se plantea un cambio de rumbo, como si quiere aportar más allá donde está — siempre nos conviene conocernos mejor, identificar cuáles son las propias fortalezas y debilidades, para poder concretar un propósito y unos objetivos que se correspondan a los retos que tenemos que afrontar y a las personas a las que podemos ayudar.

Identificar las propias fortalezas y debilidades para concretar un propósito y alcanzar los retos que debemos afrontar
¿Te diriges solo a profesorado escolar? ¿A un profesor universitario o de algún otro tipo de estudios le servirá este libro?

Por supuesto que sí. A pesar de que los ejemplos que pongo en el libro son del entorno escolar, que es lo que conozco bien porque he sido profesor durante treinta años en Secundaria y Bachillerato, la hoja de ruta para gestionar la propia marca personal es la misma. Básicamente, se trata, como he dicho, de conocerse, de identificar los hitos que nos tenemos que proponer y concretar la forma como en que tenemos que comunicarnos. Todos los ejercicios que propongo en el libro son válidos para cualquier docente.

¿Cómo es ahora mismo la reputación del profesorado en la sociedad? ¿Piensas que tienen buena marca personal?

Es posible que sea deficiente, pero menos del que tienden a pensar los mismos docentes. A veces, los comentarios sobre las vacaciones del profesorado o las noticias de agresiones a docentes por parte de algunos padres nos pueden hacer pensar que no son valorados. Para mí, esto son casos minoritarios y la mayoría de las familias valoran a sus profesores e incluso los aprecian de verdad. No podemos olvidarnos de que han confiado a lo que más quieren en el mundo. Está claro, por eso, que hay contextos más difíciles que otros.

En cualquier caso, sea cual sea la situación, cada uno y cada una, puede trabajar su propia reputación personal para llegar a tener una marca más reputada en su entorno. De eso estoy convencido. Excepto en algunos casos realmente difíciles, la reputación personal de cada profesor depende por encima de todo de lo que hace. No tenemos que buscar excusas, sino afrontar retos y ver qué podemos aportar, poniendo el punto de vista no en nosotros mismos, sino en las necesidades de nuestros compañeros y nuestro alumnado. Merece la pena.

La reputación personal de cada profesor depende por encima de todo de lo que hace, ver qué puede aportar a su entorno
Entonces, ¿no hablas de marca digital del profesorado? Hoy en día hay muchos profesores que se han hecho famosos a internet, gracias a la ayuda que están prestando, por ejemplo, en el aprendizaje de las matemáticas.

Lo hablo, sí, de hecho, le dedico un capítulo entero. Internet nos ha abierto las puertas a llegar a muchísima gente compartiendo nuestros conocimientos. Algunos han llegado, efectivamente, a hacerse célebres gracias a sus valiosas aportaciones. Es una cosa fantástica. Pero no es una obligación. Si un profesor quiere seguir este camino, que sea porque le apasiona su campo profesional y quiere compartir cosas que realmente beneficiarán al alumnado, a los docentes o a las familias. Hacerlo solo con la pretensión de adquirir reputación sería un error.

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2024-09-25T10:05:48+00:00
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